Quiero compartir contigo un sueño y me encantará que compartas lo que sueñas tú. Concluye un mes en el calendario, transcurre un tiempo de incertidumbre, complejo para muchos y en los distintos escenarios que rodean nuestra vida cotidiana ¿cómo está tu actitud, tu ánimo, tu fortaleza personal? ¿cuáles son tus más grandes anhelos para el futuro cercano? ¿escribiste tus hojas en blanco? Hoy, te invito a soñar lo que piensas.
Yo, sueño días de oportunidades, de prosperidad, alegría, libertad, llenos de un lenguaje franco, con palabras gentiles, ideas claras.
Sueño encuentros con gente querida, niños y mujeres llenos de amor, seguridad, confianza.
Sueño la cercanía de hombres íntegros, de bien, dando y recibiendo cordialidad, gentileza.
Sueño un ámbito donde los valores sean el principio de actuación de todos los que nos encontramos habitando el mismo entorno, donde la reciprocidad del respeto, responsabilidad, amabilidad y honorabilidad, se muestren en cualquier ambiente; familiar, social, laboral, académico, comercial, político, de negocios, etc.
Sueño con un presente donde la responsabilidad, tolerancia y cuidado de los adultos, sea un ejemplo y modelaje de comportamiento para los niños y jóvenes, donde las normas se cumplan, la ley se respete; y que en la libertad, seguridad e integridad, sea nuestra manera de vivir cada día.
Sueño con seres humanos que sanen sus heridas, que vivan el presente habiendo aprendido del pasado, soltando aquello que no suma y que corta nuevas y mejores posibilidades, y que más bien predominen las actitudes que ayudan a avanzar, sin detenerse por los obstáculos.
Ciertamente, hay situaciones que no está en nuestras manos controlar, pero sí, la forma en que respondemos ante ellas. La forma en que manejemos nuestra actitud significa mucho. Pensemos en mejores posibilidades, mejores momentos. Nos merecemos un trato humano, digno, sin mentiras ni manipulación, de quien sea.
En este momento el tiempo nos está poniendo muchos retos en distintos órdenes de la vida, muchas circunstancias exigen nuestra proactividad y actuación responsable, nuestra templanza y buen juicio. Visualizar el hoy que necesitamos, el mañana que queremos, requiere de acciones. Los niños y jóvenes están atentos a lo que hacemos, decimos y actuamos y quizá si soñamos que somos capaces de elegir la mejor forma de responder ante las circunstancias más adversas sea una gran manera de trascender positivamente.
Los actos tienen consecuencias ¿qué tipo de efectos queremos? Buda manifestó que "todo lo que somos es resultado de lo que hemos pensado, está fundado en nuestros pensamientos y está hecho de nuestros pensamientos". Por eso te invito a soñar, a poner ideas e imágenes a lo que piensas y que conectes también con lo que sientes.
Ralph Waldo Emerson dijo "este momento, como todos, es uno muy bueno si es que sabemos qué hacer con él". Estoy segura de que somos capaces de hacer la diferencia, que para nuestro presente y futuro podemos actuar con mayor firmeza, proactividad y con un claro y mejor propósito. Y tú ¿qué sueñas ahora?
¡Hasta muy pronto!
Ana María Nájera
Resignificar tu valor como persona